La música puede ser alegría, euforia, tristeza, amor, paz, tranquilidad, risas…a través de ella los más peques pueden explorar, expresar y experimentar una gran variedad de emociones. A demás ayuda a mejorar el lenguaje, la coordinación y las relaciones sociales de los peques. Ayuda al desarrollo intelectual, auditivo, sensorial y motriz entre otros.
Como cada año pedimos a las familias que se animen a acompañarnos para darle melodía a nuestra mañana musical. Este curso hemos tenido la suerte de que nos ha acompañado Iñaki, un papi que tocando el bajo le dio un toque divertido y de buen rollo a este día, del que nuestros peques no pudieron disfrutar más.
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